Muchas personas, en su mayoría mujeres, sufren de telangiectasias o arañitas en miembros inferiores y/o en la cara. Aunque esta condición no representa ningún riesgo médico, a mucha gente le gustaría mejorar su apariencia estética. En la Unidad Laser y Piel, contamos con la tecnología y la experiencia para asegurar la eficacia del procedimiento que permite la disminución de las telangiectasias en el área facial y en las piernas tan sólo con unas cuantas sesiones de unos pocos minutos.
¿Qué tratamiento utilizamos para mejorar las telangiectasias?
En la Unidad Laser y Piel empleamos con nuestros pacientes el láser Nd-YAG que gracias a su longitud de onda de 1064 nm permite mayor penetrabilidad que otros tipos de láser. En estudios recientes se concluye que este tipo de láser es el más indicado en el tratamiento de las várices reticulares y telangiectasias tanto en cara como en piernas.
También utilizamos otro tipo de tecnología llamada IPL (Luz Pulsada Intensa), que al igual que el láser, basa su acción en la fototermólisis selectiva. Es decir, actúa sobre los tejidos que contienen hemoglobina y deja intactas las células que están a su alrededor. Así pues se pueden disminuir los vasos sanguíneos y capilares que generan las diversas lesiones antiestéticas.
¿Qué esperar del tratamiento?
La combinación de tratamientos realizados en la Unidad Laser y Piel para combatir las telangiectasias en cara y piernas depende de la cantidad, el tamaño y la profundidad de las mismas. La mayor parte de nuestros pacientes requieren aproximadamente de 1 a 4 sesiones. El pronóstico es excelente y la mejoría oscila entre un 70 y 90%.
Es posible que posterior al procedimiento la apariencia del área tratada, dependiendo de la intensidad del tratamiento, varía en cada persona. En efecto, se puede presentar enrojecimiento, pequeñas costras, quizás un ligero dolor que desaparece en corto tiempo (menos de 24 horas).
Los resultados son inmediatos y sorprendentes.
¿Las telangiectasias vuelven a aparecer o desaparecen para siempre?
Las telangiectasias que se eliminan con láser desaparecen para siempre. Pero la cara y piernas tienen millones de capilares superficiales que pueden llegar a dilatarse si aparecen factores de riesgo como los ya mencionados anteriormente y que es imposible poder saber cuándo van a ocurrir.
La Unidad Laser y Piel siempre está a la vanguardia en tecnología y capacita permanentemente a su equipo médico permitiendo obtener excelentes resultados en cada uno de nuestros procedimientos, logrando el cumplimiento de nuestra PROPUESTA DE VALOR: Mejorar la apariencia de la piel de nuestros pacientes sin necesidad de procedimientos invasivos que pongan en riesgo su salud. La tasa de éxito en nuestros procedimientos se ve reflejada en la satisfacción de más de 15.000 pacientes. ¡No tome riesgos! En la Unidad Laser y Piel tenemos la solución que merece su piel.
¿Cuando padecemos de arañitas, qué motivos o factores pueden hacer que empeoren?
- La obesidad. El sobrepeso exige mayor volumen de sangre circulante que luego debe volver al corazón (retorno venoso) a través del sistema venoso. Esto puede sobrecargar las venas causando la insuficiencia (telangiectasias).
- El sedentarismo hace que no se empleen dos mecanismos intrínsecos que tenemos para ayudar a que la sangre vuelva al corazón, los cuales están en la planta de los pies y músculos de las piernas; esto hace que se produzca estancamiento de la sangre y mayor posibilidad para que las telangiectasias se hagan más numerosas, visibles, de mayor calibre y molestas.
- Los trabajos prolongados de pie también afectan debido a que las venas están continuamente trabajando contra la gravedad, hasta llegar a producirse un agotamiento en las válvulas que evitan que la sangre se devuelva (anti-retorno) con la posibilidad de que las telangiectasias crezcan y aumenten.
- La toma de anticonceptivos orales también puede afectar. Existen algunas pacientes a quienes la toma de anticonceptivos orales les produce gran impacto en su vasculatura puesto que los estrógenos producen un estado de hipercoagulabilidad, que favorece una mayor incidencia de enfermedad tromboembólica y aumenta la formación de Telangiectasias.
- Los periodos que intensifican cambios hormonales en la mujer como pubertad, embarazos y menopausia también favorecen el empeoramiento de las
- La exposición al sol, al calor, la ingesta de bebidas alcohólicas o de alimentos muy calientes, el estrés emocional, igualmente pueden generar o empeorar el cuadro clínico de las
- La herencia es otro factor importante en la aparición de estas lesiones vasculares.
¿Cómo prevenir la aparición o el incremento de las telangiectasias?
- ¡No al sedentarismo! Estar mucho tiempo sentado, sin ejercitar los músculos, dificulta la circulación sanguínea. Se recomienda evitar los ejercicios de alto impacto (saltar o correr). Lo ideal es realizar bicicleta, natación, caminata y yoga, en sesiones de 40 minutos al día.
- Calzado adecuado: amplio, con suela fina y suave. Evite las plataformas, los zapatos muy estrechos en la punta y el tacón muy alto (más de 4 centímetros).
- No usar ropa ajustada: Las medias ajustadas a mitad de la pierna y las fajas que se utilizan en la parte baja del abdomen alteran el retorno venoso.
- Usar medias elásticas con ajuste de compresión, que alivian la pesadez y evitan que la sangre se vaya hacia las venas más pequeñas y cercanas a la piel.
- Mantener el peso adecuado y llevar una dieta equilibrada, con abundante líquido, frutas, verduras, hortalizas y cereales. También incluya todo tipo de lácteos, carnes blancas (pollo y pescado) y máximo dos veces por semana carne roja. Disminuya el consumo de sal.
- Evitar los anticonceptivos orales.
- Elevar las piernas, ya que calma la hinchazón y hace menos dolorosas las telangiectasias.
- Masajes manuales: Estos deben ser ascendentes y suaves (sin aparatos ni vibradores), siempre desde los pies hacía los muslos.
- Dormir en una buena posición: no apoyar una pierna sobre la otra, porque la presión lesiona el tejido subcutáneo, interrumpe la irrigación y la corriente nerviosa. También, puede ser muy útil dormir con los pies ligeramente levantados.
- Evitar fuentes de calor excesivo: una prolongada exposición al sol, calefacción en las piernas o generada mediante luz radiante, los baños muy calientes y la depilación con cera.